Gel Coat
Mal denominado en muchas ocasiones “solid surface”, se conoce por materiales de gel coat, aquellos que presentan unas características diferentes en su interior y exterior; motivo por el que la denominación sería incorrecta.
El gel coat es la primera capa líquida que se inyecta en un molde preformado, compuesta de resina. Esta capa inicial supone el resultado final y el acabado de la última superficie, recubriendo laminados de diferentes materiales.
Características del gel coat
– Esta superficie final aporta las características necesarias para proteger el material de:
- Las inclemencias climatológicas
- Cambios leves de temperatura
- Radiación UV
- Humedad
- Productos químicos poco agresivos
– Permite pigmentar en suspensión de manera estable para mantener el color.
– Su acabado es en alto brillo.
– Suelen aplicarse para barcos, instalaciones sanitarias y usos generales que no requieran altas propiedades.
Composición del gel coat
Parte de la calidad del producto viene definida por el espesor de la capa final de gel coat, debido a que, si esta se pierde por un golpe o rayadura, el material perderá sus propiedades.
El material utilizado en esta capa exterior también es importante, dado que será el material que dará todas las propiedades al conjunto. Esta capa deberá soportar el uso del producto, la limpieza y el desgaste con el paso del tiempo.
La composición de la parte interior, será la que transfiera la dureza y resistencia. En el caso de los platos de ducha por ejemplo, producto en el que está muy introducido este material, es la que deberá soportar, el peso de la persona o personas que hagan uso del mismo. También es la que debe proporcionar adherencia a la capa final, un punto crítico de este material.
El resumen general de este material no es negativo, dado que permite realizar productos con acabados de diseño, con bajos costes. Simplemente es importante conocer sus propiedades, para poder decidir donde utilizarlo.
